martes, 7 de abril de 2009

HOTELES ENCANTADOS



Cuando era bastante más jovencita, el rey de los programas de miedo era el Dr. Jiménez del Oso. Presentaba un programa de televisión sobre misterios y enigmas llamado Mas Allá y si te quedabas a verlo (estos programas, muy convenientemente, siempre se emitían allá por la medianoche), a poco impresionable que fueras (y yo lo era), luego te pasabas la noche en vela y con la cabeza bajo las sábanas (aunque eso demostraron en la película de The Grudge que es poco efectivo... el fantasma puede aparecer perfectamente debajo de las sábanas, a tu lado...).

Después, el relevo lo tomó Iker Jiménez con su Cuarto Milenio, programa que debo admitir, no he visto nunca. En realidad ninguno de los dos, eran horas a las que prefería meterme en la cama, sin ideas que me dieran miedo en la cabeza, y en el caso de Mas Allá, sólo lo ví cuando trataban algún tema que me llamara la atención especialmente.

En cuanto a Iker Jiménez, curiosamente mi camino se ha cruzado con él en persona en dos ocasiones. La primera fue con ocasión de su primer libro. En aquella época yo tenía ciera amistad (que espero no haber perdido, aunque hayamos perdido el contacto) con Carlos Canales y Jesús Callejo, autores de la trilogía Seres Mágicos en España y con quienes contacté por carta cuando publicaron su primer libro. A diferencia de otros autores, Jesús y Carlos fueron accesibles y encantadores, contestaron a mis cartas, e incluso concertaron algunas citas con Josema y conmigo aprovechando algunos de mis viajes a Madrid. La última vez que les ví en persona fue con ocasión de la presentación de dicho libro, en el que ellos apadrinaban a un jovencísimo Iker, y presentación en la que también coincidí con Juan Eslava y Galán. A dicha presentación yo ya fui con un Leo bebé, y un Josema que trabajaba en Madrid, y las complicaciones de la vida por aquella época me imipidieron seguir quedando con ellos en otras visitas a la capital (llega un momento que conoces a tanta gente que quedar con todos ellos es imposible), y me perdí sus apasionantes conversaciones de sus aventuras como “cazafantasmas” semiprofesionales y de recopiladores de mitos y leyendas.

Creo que Jesús sigue en la brecha, en programas de radio en Onda Cero y demás actividades, y en cierto modo le tengo algo de envidia. También me siento algo idiota por haber perdido el contacto con él, ya que más allá de su posible fama como investigador de estos temas, era (es) una persona estupenda, y me gustaría, como digo, seguir pensando que es mi amigo, de alguna forma. En cualquier caso, gracias a la pequeña investigación que hago siempre antes de publicar una entrada en este blog, he localizado su página web, y quizás vuelva a intentar contactar con él. Nunca es tarde para recuperar las amistades, no perdidas, pero quizás sí un poco abandonadas...

Volviendo a Iker, la segunda vez que me crucé con él fue en las fiestas de Los Amantes de Teruel del año pasado, 2008, donde en el centro de un revuelo en una callejuela cercana a la plaza del Torico, estaba él firmando autógrafos vestido de Cruzado hollywoodiense.

En realidad, dos encuentros poco importantes, más anecdóticos que otra cosa, pero que me han servido de introducción al tema.

Que viene todo porque el domingo, cotilleando en un foro en el que tengo la costumbre de leer, pero no de escribir, más que nada porque me quemaría mucho en algunos comentarios que me parecen muy tristes y muy de personas que no tienen otra cosa que criticar a la gente que se divierte, como si pasarlo bien con nuestros hobbies estuviera mal (ojo, otras personas dicen cosas con mucho sentido común, y por eso de vez en cuando me leo ese foro), había una entrada con respecto a los programas de Iker Jiménez.

Yo había leído por ahí que sus reportajes eran poco de fiar, que buscaba el sensacionalismo y que poco menos que no tenía muchos escrúpulos en inventarse un fenómeno paranormal si este no aparecía en el sitio esperado. Una amiga que me consta que me lee y a la que no nombraré por si ella no lo desea nos comentó una vez que Iker se había aprovechado de una catástrofe sucedida en el pueblo de su familia para inventarse apariciones fantasmales en el mismo, aunque nadie de ese pueblo había reportado nunca nada... Curiosamente, otra amiga, que no tiene nada que ver con esta, nos contó una vez (en uno de esos momentos que dedican los amigos a hablar de cosas paranormales) que un familiar suyo se había encontrado con una aparición fantasmal en dicho pueblo, sin saber que lo era, y sin saber nada de la catástrofe acontecida. En situaciones así, en las que ambas personas me merecen la misma credibilidad, no sé realmente a qué atenerme. En cualquier caso, me reafirmo en lo que digo siempre... yo en fantasmas, no creo, pero les concedo el beneficio de la duda...

Pues bien, a raíz de aquellos comentarios que leí sobre el programa de Iker, y rebuscando en las “pifias” que sobre el mismo comentaban en dicho foro, me encontré con un programa en el que habían hablado del incendio del Hotel Corona de Aragón, aquí en Zaragoza. Me acordé inmediatamente de mi amiga, la que he comentado antes, y pensé para mí “¿Ahora van a sacar fantasmas en el Corona?”, cuando, como Zaragozana que soy, desde los muchos años que hace que sucedió el incendio, no he oído nunca ningún rumor de que dicho hotel esté encantado. De hecho, ha sido durante muchos años el mejor hotel de la ciudad, y recuerdo que en mis tiempos de “fangirl”, me iba con las amigas del club de fans de Spandau Ballet a las puertas del mismo a pedir autógrafos a las celebridades que en él se alojaban (allí conseguimos hablar con el mismísimo Sting, pero quizás ese sea tema para otra entrada...), y como digo, ni rumores, ni comentarios, ni, por supuesto, fenómenos extraños.

Que no quiere decir nada, porque soy el tipo de persona que se entera la última de las cosas, pero vamos, me sorprendió. Así que aunque no vi el programa en directo, me fui de cabeza a Youtube a cotillear.

El reportaje fue decepcionante, en el sentido en que se centraba más en el enigma sobre si fue un accidente o un atentado, que en ninguna supuesta actividad paranormal, pero como internet es tan amplia, y, como digo siempre, si no lo encuentras en internet, es que no existe, a cambio sí que encontré varios blogs (curiosamente repetitivos) que hablaban de una habitación encantada, la 510.

Además, en el mismo programa de Cuarto Milenio en el que hablaban del Corona de Aragón, había un reportaje sobre otro hotel, el Parador Nacional de Cardona. Por algún motivo cambié mentalmente los nombres y pensé en Carmona, el Parador de Sevilla donde Spandau Ballet rodó su video Gold, pero pronto salí de mi error.

En cualquier caso, ya metidos en harina, decidí verme el reportaje y pasar una noche de miedo, mientras Leo y Josema veían anime en la tele, Dos habitaciones de hotel encantadas. Me acordé (mucho) de la película de John CusackHabitación 1408”, película por cierto bastante recomendable porque consigue generar una auténtica atmósfera, más que de terror, de auténtica inquietud y claustrofobia, y me pregunté si no habrá alguien como el protagonista de dicha película, que se dedique a recorrer hoteles encantados para confirmar, o desmentir, dichos encantamientos.

Ahí queda la idea. Yo no creo que fuese voluntariamente a una habitación de hotel encantada, por mucho que me gusten estos temas, y por muy segura que esté de que al final no me va a pasar nada. Me dan demasiado miedo (y respeto) como para eso. Pero despiertan mi curiosidad, y me gusta leer sobre ello.

Que me lo crea o no, es otra cosa... pero siempre dan que pensar....

9 comentarios:

Han Solo dijo...

a mi tambien me gusta leer sobre ello
pero todo se queda ahi

Nicasia dijo...

Yo tengo el libre de hadas y el de los duendes, me falta el de los gnomos. Cuando vengas a Sevilla os voy a llevar a San Luis de los Franceses, una iglesia que fue hospicio durante la guerra civil. Tanto el Dr Jimenz del Oso como "Friker" han hecho trabajos sobre el tema. Y la calle donde está es (dato verídico) la de mayor indice de suicidios de la ciudad. Hoy día no tiene tiene vigilancia nocturna, aunque es un edificio en proceso de restauración. Parte el hospicio ardió durante la guerra y dicen que se escucha gritar a los críos...
Inquietante, que diría friker.
También os llevaré a la calle donde se parece la bella Susona para que veas su calavera

Sara Mor dijo...

Hola :)

Los libros de los que hablas, de gnomos, duendes y hadas, me encantan, ademas están muy bien escritos.

A mi también me encantan esos temas, pero soy incapaz de ver o leer sobre ello a la hora de irse a dormir.
Como me dijiste tu en bjdoll, me encantaria ver un fantasma, pero me moriria de miedo!

Sonia dijo...

Pues si, de San Luis de los Franceses habia oído hablar, pero será interesante verlo en vivo y en directo. Lo de la bella Susona es la primera vez que lo oigo, ya me ampliarás información...

¡Daguona! ¡Gracias por animarte a comentar! A mi hay un motivo principal por el que me gustaría ver un fantasma, y es porque eso me demostraría que hay algo más allá de la muerte.. Supongo que sustituiría un miedo por otro...

Han Solo dijo...

Con un par de huevos, Sonia
Si Señor

Último Íbero dijo...

En Zaragoza tienes un sitio dónde "investigar": el hospital Provincial, precisamente muy cerca del hotel Corona de Aragón.

Yo no sé si querría ver un fantasma, me gustaría más ver un ángel: ambos te mostrarían que hay un más allá y el segundo seguro que sería mucho más amable y hermoso ;)

Sonia dijo...

Lo del Hospital Provincial no lo sabía, pero con la cantidad de historia que hay ahí concentrada no me sorprende. Aunque como decían en Medium, pocos lugares debe haber más atestados de almas en pena que los hospitales... Me alegro de tener una especialidad en la que no hago turnos de noche, la verdad.

Lo del ángel, mira, no se me había ocurrido... debe ser porque no se prodigan tanto las historias de ángeles como las de fantasmas. De todos modos, hay por ahí una serie de fantasmas de seres queridos que creo que no me darían miedo si les viera... mi tío el que era cura (la mejor persona que he conocido nunca), mi abuelo, y alguno más que seguro que se me olvida... Dudo mucho que ninguno de ellos me quisiera hacer ningún mal...

Último Íbero dijo...

Bueno, si los fantasmas son almas en pena con algún asunto pendiente en nuestro mundo, no deberían encontrarse ejemplares que respondan a gente que en vida fue buena y no le hayan quedado asuntos pendientes.

Para los cristianos, nuestros seres queridos que han fallecido, si son agraciados con el Cielo, se convierten en cierto modo en nuestros intercesores ante Dios. Así que no esperes verlos como fantasmas, antes bien, espera tenerlos como protectores :)

Y eso sin contar con el ángel de la guarda de cada uno de nosotros, claro ;)

Sara Mor dijo...

Acabo de leer la entrada anterior...qué precioso.
Y tras tantas historias, cómo no van a existir las hadas?
Ojala pudiesemos seguir viendolas al crecer...

 
Vivir para soniar - Templates Novo Blogger